Con una mayoría “artificial e ilegal”, Morena amenaza los derechos humanos, acceso a la justicia y el sistema de pesos y contrapesos de las y los mexicanos
Unas horas después de que la Cámara de Diputados aprobó la reforma que hace inimpugnables las modificaciones a la Constitución, más conocida como supremacía constitucional, comenzó su ratificación en las legislaturas estatales, como fue el caso del Congreso de la CDMX, donde la oposición llegó con vestimenta negra y lápidas.
En su carácter de Constituyente Permanente, la Legislatura capitalina aprobó la minuta con proyecto de decreto por el que reforma el artículo 107 y se adiciona un quinto párrafo al artículo 105 de la Constitución, en materia de inimpugnabilidad de las adiciones o reformas a la Constitución federal.
Al respecto, la presidenta de la Mesa Directiva, la morenista Martha Ávila, precisó que durante la aprobación de esta minuta se cumplió con el deber constitucional, a través del libre debate y de manifestación de las ideas de todas las expresiones políticas representadas en el Congreso de la CDMX.
Con vestimenta negra y lápidas, las y los diputados panistas mostraron su luto por la aprobación de la que dijeron es la “más tóxica de todas las reformas” de Morena, que con una mayoría a la que calificaron de “artificial e ilegal”, señalaron que el partido guinda amenaza los derechos humanos, el acceso a la justicia y el sistema de pesos y contrapesos de las y los mexicanos.
¿Por qué las reformas no pueden ser revisadas vía controversia, amparo o acción de inconstitucionalidad?
La diputada panista Lizzette Salgado Viramontes, con vestimenta negra, consideró importarse preguntarse por qué las reformas planteadas no pueden ser revisadas vía controversia constitucional, acción de inconstitucionalidad y juicio de amparo.
Enfatizó que un poder reformador no puede estar por encima de la SCJN, pues ésta es parte de un poder constituido que preserva el orden constitucional, y quitarlo altera un equilibrio básico de los poderes del Estado.
Limitación a la capacidad de cuestionar
El diputado del PRI Omar Alejandro García Loria expresó que representan una limitación a la capacidad de cuestionar y revisar los pactos sociales que nos rigen.
Lamentó que esa discusión no respete los tiempos legislativos e hizo un llamado al gobierno federal y a todos los poderes públicos para recordar “que el control constitucional no es una amenaza”, sino un recurso necesario para preservar la legitimidad y el equilibrio entre poderes.
Mayoría “artificial” en el Congreso de la CDMX
Por Movimiento Ciudadano, Patricia Urriza Arellano criticó a la mayoría legislativa “artificial” en el Congreso local y expresó que esta no les da derecho a eliminar los mecanismos de defensa de la ciudadanía contra el poder. Dijo que esta reforma puede perjudicar a todos en el futuro, al buscar eliminar que la SCJN revise las reformas a la Constitución.
Ricardo Rubio Torres, del PAN, consideró que atenta contra el Estado de derecho y la independencia de los poderes, al restar facultades al sistema judicial como un mecanismo para impugnar y de defensa jurídica, como medios de control constitucional, además de ir en contra de los tratados internacionales.
Voces a favor
Al hablar a favor, la coordinadora de la bancada de Morena, Xóchitl Bravo Espinosa, afirmó que esta reforma tiene el propósito de dar certeza jurídica y estabilidad al máximo ordenamiento legal del país.
Además, agregó, permitir el ejercicio de la soberanía popular a través de sus representantes legítimamente electos y clarificar que el actual sistema constitucional no considera que una reforma constitucional es impugnable.
En su intervención, el legislador del PT Ernesto Villarreal Cantú, indicó que esta reforma es la ruta correcta para proteger el Estado de derecho y restituir el carácter popular del régimen político, por lo que contribuye a fortalecer la división de poderes y la supremacía constitucional.