Arabia Saudí cerró 2024 con 345 ejecuciones, la mayor cifra en el reino desde que hay registros, mientras que este año lo ha comenzado con siete ajusticiados, informó este jueves a EFE un responsable de la Organización Europea-Saudí para los Derechos Humanos (ESOHR, en inglés).
En total son 345 los ejecutados, entre ellos 207 saudíes y 138 extranjeros, afirmó Taha al Hajji, asesor legal de la ONG, que hace un seguimiento de las ejecuciones en el país árabe, lo que supera con creces 2022, cuando el reino ajustició a 196 personas.
Entre los ejecutados en 2024, han registrado nueve mujeres, también la mayor cifra en el reino desde que existen registros, apuntó.
Según la ONG, que publicará la semana que viene un extenso informe sobre las ejecuciones en 2024, 162 ajusticiados estaban condenados por asesinato, mientras que otros 122 por narcotráfico, entre lo más destacados.
En noviembre de 2022 Arabia Saudí llevó a cabo las primeras ejecuciones por delitos relacionados con drogas en casi tres años, revirtiendo así una moratoria sobre las ejecuciones por tales delitos anunciada por la Comisión Saudí de Derechos Humanos en 2021.
A pesar de sus reiteradas promesas de limitar la pena capital, las autoridades saudíes han incrementado las ejecuciones al tiempo que incumplen sistemáticamente las normas internacionales sobre juicios justos y las salvaguardias para los acusados, de acuerdo a Amnistía Internacional.
Las autoridades también han utilizado la pena de muerte para silenciar la disidencia política, castigando a ciudadanos de la minoría chií del país que apoyaron las protestas «antigubernamentales» entre 2011 y 2013.