Deportaciones de Trump, obligan a los migrantes a salir de Tapachula.
A pesar de las amenazas de deportación masiva anunciadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por la frontera sur de México continúa el arribo de cientos de migrantes a este país.
Sin embargo, el tiempo apremia, pues llegan, e inmediatamente después continúan su avance hacia el centro de la nación a manera de evitar, quedarse en este municipio fronterizo con Guatemala.
Para los migrantes, es prioritario, el “hoy o nunca”, ante la cercanía de la fecha -el 20 de enero-, de la asunción al poder del presidente norteamericano Donald Trump, y bien vale la pena arriesgar el todo por el todo, pues ya muy lejos de sus países de origen, el regreso ya no es la solución sino avanzar o quedarse en México.
Sin embargo, seguirán insistiendo llegar a suelo estadounidense, pero de manera legal a través del programa de la CBP One, pues aún tienen la esperanza de alcanzar esta opción, mientras que Donald Trump no asuma la presidencia.
Así lo externaron tres familias de venezolanos que este fin de semana lograron a travesar a México por el Río Suchiate, pero que no se quedarán en Tapachula para realizar sus trámites, sino que se internarán al país y tratarán de obtener el permiso para transitar en otro punto del territorio nacional.
“Vamos a estar aquí mientras podamos subir, porque nosotros no podemos regresar, así que seguiremos esperando la cita para avanzar, ya que nuestro destino ahora son los Estados Unidos”, expresó Saturnino Figueroa, uno de los integrantes de las familias de venezolanos.
Ya es muy tarde para dar marcha atrás, además que se encuentran muy lejos de su país y que no creen que alguien de Venezuela quiera regresar, debido a las difíciles condiciones para vivir allá, la pobreza y la persecución política contra los que no piensan como el gobierno de Maduro.
Mientras tanto, en otro punto de la zona costa de Chiapas, en Pijijiapan, desfallecidos, hambrientos y con huellas de cansancio en el rostro por el viacrucis que le representar caminar por las carreteras del estado, hay momentos que flaquean y se dan por vencidos pero el orgullo los levanta y quieren continuar su viaje, pero piden ayuda a la presidente de México, Claudia Sheinbaum para llegar a su destino.
Por estas y otras razones más, piden poder viajar en autobús, ya no quieren viajar en caravana, ni a pis, porque el tiempo se agota y apenas tienen tiempo para llega al otro extremo del país y solicitar que darse con sus familias y poder encontrar empleo que les cambie la vida a ellos y la de sus familiares.
Para todos los migrantes es imprescindible ingresar de manera legal a los Estados Unidos, aunque es algo muy complicado, ya que los traficantes de humanos piden mucho dinero, lo que es peor que la mayoría de los no cuentan con los recursos necesarios para pagar, porque lo que cuentan es para tratar de sobrevivir en este largo recorrido.
