Enfrentamientos fueron entre pobladores y crimen organizado. La resistencia civil marca parteaguas en la comunidad del sur Edomex
Hace exactamente un año, el 8 de diciembre de 2023, la comunidad de Texcapilla, perteneciente al municipio de Texcaltitlán, se convirtió en el escenario de un violento enfrentamiento que dejó 14 personas muertas, siete heridas y diez desaparecidas.
Aquella tarde, decenas de pobladores, cansados de las extorsiones y el cobro de piso, decidieron resistir y enfrentarse a presuntos integrantes del crimen organizado.
El choque ocurrió en el campo de futbol de la comunidad, donde se desató una balacera que dejó un saldo devastador.
Desde entonces, la región se encuentra bajo un fuerte operativo de seguridad, con patrullajes intensificados y presencia constante de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM), la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El impacto del enfrentamiento cambió la vida en Texcapilla. La comunidad, conocida por su tranquilidad, se convirtió en un símbolo de resistencia ante los abusos del crimen organizado.
Sin embargo, el costo fue alto: familias enteras se vieron afectadas, ya sea por la pérdida de sus seres queridos o por la incertidumbre de no saber el paradero de los desaparecidos.
Desde entonces, el gobierno estatal ha reforzado la seguridad en la zona sur del Estado de México (Edomex).
Según autoridades, el número de efectivos desplegados se ha duplicado, y los patrullajes son constantes para evitar la reaparición de grupos delictivos.
«La prioridad es garantizar la seguridad de las familias y evitar que estos hechos se repitan», señalaron fuentes de la SSEM.
Texcapilla no es un caso aislado en el sur del Estado de México. La región, caracterizada por su difícil acceso y sus caminos serranos, ha sido históricamente un terreno fértil para grupos criminales que disputan el control territorial. El enfrentamiento de hace un año fue un recordatorio brutal de esta problemática.
Organizaciones de derechos humanos han insistido en que las autoridades deben trabajar no solo en el reforzamiento de la seguridad, sino también en el desarrollo social y económico de la región para reducir las condiciones que favorecen la presencia del crimen organizado.
A pesar del aumento en la presencia militar y policial, habitantes de Texcapilla y comunidades vecinas señalan que aún viven con temor.
«La seguridad ha mejorado, pero no nos sentimos completamente tranquilos. Queremos justicia para los que murieron y saber qué pasó con los desaparecidos», comentó un habitante que prefirió no dar su nombre.
Por su parte, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México asegura que las investigaciones sobre los hechos de 2023 siguen abiertas, aunque no se ha informado de avances significativos.
Mientras tanto, Texcapilla trata de recuperar su vida cotidiana, pero la herida de aquel 8 de diciembre sigue latente. Para muchos, esa fecha será siempre un recordatorio del costo de la resistencia y la necesidad de construir un futuro más seguro y justo para toda la región.