Con el objetivo de integrar a jóvenes en actividades de capacitación y dotarlos de herramientas para una vida mejor, el Gobierno de México implementó estrategias en la política laboral y pública en favor del sector productivo de nuestro País.
La nueva política laboral será fundamental para atacar la pobreza, la desigualdad y con ello beneficiar el empleo, la economía y la calidad de vida que México requiere para salir adelante.
Uno de los temas principales y que el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha reiterado como prioridad, es el sector juvenil. A partir de esta idea se propone el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, el cual será instrumentado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Una estrategia dirigida a mexicanos y mexicanas entre 18 y 29 años de edad, que actualmente no estudian ni trabajan; un apoyo que pretende beneficiar el desarrollo personal y la inserción de la juventud en el mercado laboral.
En el plan de acción de dicha estrategia se brindarán becas mensuales de 2 mil 400 pesos y 3 mil 600 pesos para quienes accedan a estudios universitarios e inicien su trayectoria laboral, respectivamente.
La idea es que este proyecto beneficie a 2.6 millones de jóvenes por cada año.
El Programa está centrado en dos vertientes:
Por un lado, la Educativa: Dirigida a 300,000 jóvenes que hayan concluido el bachillerato y busquen realizar estudios universitarios.
Y por otra, la Capacitación en el Trabajo: Dirigida a 2.3 millones de jóvenes, por medio de la cual se vinculará a jóvenes con centros de trabajo para que durante un año reciban capacitación y tutoría.
Se buscará que las y los beneficiarios del Programa, una vez concluido el año de capacitación, reciban un certificado que acredite la adquisición de habilidades y competencias.
Entre los principales estatutos se encuentran:
Impulsar la capacitación laboral, a partir de la contratación de jóvenes como aprendices o becarios en empresas, realizando labores productivas o sociales, con el fin de mejorar su calidad de vida.
Alejar a jóvenes del desempleo y acelerar su preparación para las actividades productivas, en beneficio de este sector y del crecimiento económico nacional; y finalmente,
Incluir al sector privado en actividades de responsabilidad social.
La vinculación laboral del Programa se dará de la siguiente forma:
El 70% de los beneficiarios se integrará en el sector privado, entendiendo con ello, aquellas compañías, empresas, talleres, entre otras, que realizan alguna actividad económica.
El 20% de los beneficiarios se integrará al sector público, es decir, las instituciones de la administración pública federales y locales.
El 10% de los beneficiarios se integrará al sector social, específicamente las organizaciones sociales que realizan actividades sociales sin ánimo de lucro.
Es importante mencionar que para llevar a cabo la implementación y medición del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro se ha desarrollado una Plataforma que alberga y cruza toda la información relacionada con el perfil, intereses y ubicación de los jóvenes, con el objetivo de vincularlos más fácilmente a las opciones laborales disponibles.