Apenas Ifigenia Martínez y Hernández, recién nombrada presidenta de la Mesa Directiva, declaró legalmente constituida la LXVI Legislatura de la Cámara de Diputados, la coalición que formaron morenistas y aliados reventó en algarabía, con la Jucopo en manos de Morena.
Eran las 11:59 horas cuando Ifigenia Martínez, quien también preside la Mesa de Decanos, declaró abierta la sesión constitutiva y enseguida tomó la protesta constitucional a los 476 diputados presentes, según el registro inicial del quórum.
Muy animada se mostraba la aplanadora legislativa que se formó con la supermayoría de diputados que el Instituto Nacional Electoral (INE) concedió a los partidos de Regeneración Nacional (Morena), Verde Ecologista (PVEM) y del Trabajo (PT).
El animoso festejo se enardeció no solamente porque la fracción parlamentaria de Morena tiene por sí misma la mayoría absoluta o porque, sumada, la coalición lopezobradorista tiene la mayoría calificada.
Por si fuera poco, Morena y el PVEM pactaron que 15 legisladores pevemistas se despojaran de sus camisetas “verdes”, se enfundaran camisetas guindas y pasaran a formar parte de la bancada morenista.
Con esa transferencia de diputados “verdes”, Morena sumó en total 257 legisladores de los 500 que integran la Cámara de Diputados.
Gracias a esa “estrategia legislativa parlamentaria”, así definida por el futuro líder de la bancada del PVEM, Carlos Puente Salas, Morena tendrá el control de la decisiva Junta de Coordinación Política (Jucopo) durante los tres años que durará la LXVI Legislatura.